Unos 10.500 kilómetros separan la Quebrada de San Lorenzo, Salta, de la tierra francesa donde vivían Houria Moumni y Cassandre Bouvier. Y esa distancia están dispuestos a recorrer los investigadores parisinos, con el objetivo de establecer quiénes, cómo y por qué mataron brutalmente a las turistas. "En estas horas, está previsto que el juez (Martín) Pérez se comunique con su par francés, porque allá se abrió una causa penal y no sabemos aún qué enfoque van a darle. Entre hoy (por ayer) y mañana quizás haya novedades sobre esto", indicó el vocero del Poder Judicial Salteño, Marcelo Báez, en diálogo con LA GACETA.

Además, confirmó que hay un hombre aprehendido en el marco de la investigación, y que fue identificado como Daniel Octavio Eduardo Vilte. "Él no habría tenido más que un rol secundario en el hecho. Hay pistas de que puede tener algún conocimiento, y por eso se lo está investigando", remarcó Báez, vía telefónica.

Bouvier, de 29 años, y Houria, de 23, formaban parte del Instituto de Estudios Superiores de América Latina (Iheal) de la Universidad Sorbonne Nouvelle-Paris III. El 11 de julio llegaron a Salta, luego de una estadía en Buenos Aires. Se alojaron en un hostel, pero cuatro días después no se supo nada más de ellas.

El viernes, las jóvenes fueron halladas en la Quebrada de San Lorenzo, un lugar atractivo que muchos turistas recorren cada año. Allí, reveló el juez Pérez, fueron encontrados dos proyectiles que, al parecer, habrían sido los que acabaron con la vida de Houria. Una de las hipótesis indica que ambas podrían haber sido secuestradas en otro sitio y ultimadas en ese paseo. Según el diario salteño "El Tribuno", el magistrado señaló que Bouvier registraba signos de abuso sexual (incluso, sufrió fractura de cadera). Su amiga, en tanto, tenía en uno de sus puños cerrados el mechón de pelo que es analizado y que podría pertenecer al agresor. Se sospecha que Houria habría visto cómo violaban a su compañera y la ultimaban de un disparo; luego, habría logrado correr algunos metros, pero los homicidas fueron más rápidos. Esta posibilidad, según la agencia "NA", se basa en los elementos hallados en la escena del hecho. La ropa interior de Bouvier no pudo ser hallada todavía.

La cuestión del arma

El lunes, un puestero de la zona donde se cometió el crimen fue demorado durante unas horas. Ayer, el juez dispuso la aprehensión de Vilte, quien no reside en el lugar, aunque tiene familiares allí. Las sospechas son que el hombre habría tenido alguna participación referida al arma con la que ultimaron a las turistas. Sin embargo, hasta ahora no hay pruebas concretas al respecto. "Sigo investigando todas las hipótesis que se están analizando", expresó Pérez. Y agregó: "al no tener datos de esos 10 días (entre la desaparición y el hallazgo de los cuerpos), se complica la investigación y es difícil reconstruir todo eso, que es a lo que nos estamos abocando".

Ayer, el magistrado volvió a reunirse con el cónsul general francés, Patrick Flot y otros representantes del gobierno galo. "Fue un encuentro muy formal, lógicamente, referido a la entrega de los cuerpos para su repatriación", señaló Báez.

Además, aclaró que los familiares de las víctimas pisaron ayer suelo salteño, aunque se recluyeron para no tomar contacto con los medios de comunicación. Sin embargo, sí estuvieron reunidos con el gobernador salteño, Juan Manuel Urtubey. En las próximas horas, podrían tener un encuentro con el juez Pérez.

Por ahora, no trascendieron detalles sobre cuál será la participación de las autoridades francesas en la investigación de los homicidios. Según versiones, podrían iniciar una pesquisa paralela, aunque no se dio a conocer sobre la base de qué legislaciones internacionales.

El ministro de Gobierno salteño, Pablo Kosiner, remarcó que consideran fundamental el esclarecimiento del crimen de las turistas. "Estamos a la expectativa de las medidas que disponga el juez sobre la persona que está detenida y a disposición de la Justicia", dijo el funcionario. Y remarcó: "no estamos acostumbrados a este tipo de hechos".